Espectaculares dos días en nuestro
santuario-talismán de Beas. Curiosamente, el trabajo que allí desarrollamos,
junto a nuestro proyecto hermano de Valverde del Camino, siempre nos deja muy
satisfechos. Pero mucho. Ya sucedió con la gente de Grupo Élite y a lo largo
del jueves y el viernes pasado volvimos a experimentar la misma sensación de la
mano del facilitador, coach y experto en marca personal, entre otras muchas cosas,
David Barreda.
A través de una puesta en escena
muy amena y una metodología atractiva y esclarecedora, David expandió nuestros
magros conocimientos sobre marca personal con explicaciones muy explícitas, y
con un lenguaje crudo y muy concreto. Justo lo que necesitábamos. Nos explicó
que el mundo laboral ha cambiado, que no parará de hacerlo y que, además,
nosotros no podremos hacer nada para impedirlo, al igual que no lo hemos podido
hacer hasta ahora. Que el ser humano ha incorporado herramientas nuevas que han
cambiado el presente y la realidad. Que vivimos en lo que el pensador Zygmunt
Bauman define como un “mundo líquido”, caracterizado por la volatilidad, la
incertidumbre, la complejidad y la ambigüedad.
Barreda insistió en que nos
encontramos ante un nuevo paradigma para el que nuestras herramientas están
anticuadas, y que debemos aceptarlo y desarrollar la capacidad de adaptación
para poder emplearnos. En este sentido, reveló que actualmente las competencias
claves del nuevo trabajador pasan por la capacidad de aprender constantemente, la
resiliencia extrema, la colaboración en red, la generación de cambios y la
curación de contenidos. El trabajador de hoy tiene que reponerse rápidamente
ante situaciones adversas y salir reforzado del proceso. Tiene que trabajar en
varios proyectos y plataformas, con ubicuidad y atemporalidad. Debe generar
propuestas e iniciativas, tiene que provocar con su trabajo y actitudes nuevas
circunstancias y enfoques. Y, finalmente, tiene que luchar contra el exceso de
información inútil o poco aprovechable; buscando la mejor, seleccionándola y
compartiéndola de manera adecuada y competente.
Para todo ello, es fundamental la
marca personal. Encontrar la nuestra es el principio para despuntar entre el
resto de personas en búsqueda de empleo. Hasta aquí, nada que no hayamos visto
antes. El salto cualitativo que nos ofreció David Barreda vino a través de sus
fantásticas dinámicas de trabajo, ya sean individuales o de equipo. Durante los
dos días que pasamos en el CADE de Beas, nos dedicamos a rellenar un cuaderno que
se convertiría en nuestra guía personal e intransferible para encontrar nuestra
propia marca personal. O al menos, para comenzar ese proceso con un andamio
sólido y mucha motivación.
En ese cuaderno volcamos nuestra
personalidad, nuestra visión, nuestra misión, los estados profesionales que
podemos ser capaces de asumir, el
feedback que despertamos en nuestros compañeros de Lanzadera, nuestro
objetivo, las necesidades que podemos satisfacer en un hipotético empresario y
los beneficios que podemos procurar a su organización. Ese cuaderno no será la
panacea, pero se trata de algo muy próximo. Y lo es, aparte de la maestría que David
Barreda tiene para gestionarlo con cada uno de nosotros a través de sus
inspiradoras dinámicas, por el poder que tiene sobre nosotros vernos escritos
en tinta sobre papel. Es la fuerza y el empuje que otorga saber que esas palabras
que escribimos en el cuaderno somos nosotros en deconstrucción la que tiene que
dirigir nuestra estrategia. Son las piezas del puzle que, una vez bien
ordenado, podrá sacar adelante una entrevista de trabajo, un proceso de
selección, una presentación o un mejor ordenamiento de nuestras inquietudes y
decisiones para encontrar trabajo.
Durante los dos días que
estuvimos en Beas, hubo momentos emotivos, encuentros y desencuentros
personales, pero sobre todo un ambiente electrizante, de ilusión y de emoción
por ver cómo, a poco que ahondemos en nosotros mismos bajo la dirección de
personas como David Barreda, la consecución de nuestro objetivo está cerca. Tal
y como te dijimos en el último minuto del taller, nos diste seguridad,
claridad, concreción, herramientas, autoconocimiento, guía, una buena dosis de
trabajo para realizar gradualmente, visibilidad y reafirmación personal y
profesional. Nuestro más profundo y sincero agradecimiento por tu trabajo,
David.
No hay comentarios:
Publicar un comentario